Aquellas mujeres de fuego, una pieza de danza y música flamenca que retrata la lucha de las mujeres durante la Guerra Civil Española
Por Javiera Miranda Riquelme
@javieramirandariq
Dirección y coreografía: Soledad Bustamante y Érica Gigena. Bailarinas: Daniela Alífano, Floriana Berardi, Rosaura Buenaventura, Soledad Bustamante, Erica Gigena, Patricia Jones, Yanina Martinez, Cintia Lorena Molina. Dirección musical: Esteban Gonda. Sala: Hasta Trilce (Maza 177, CABA). Funciones: Jueves 21 horas, domingos 20 y 22 horas. Entradas por Alternativa Teatral .
El rol de las mujeres durante la Guerra Civil Española fue fundamental y transformador. Aunque históricamente se las ha asociado principalmente con tareas de cuidado en la retaguardia, muchas participaron activamente combatiendo en el frente, tomando decisiones políticas y dirigiendo acciones de guerrilla. Un ímpetu de vanguardia nada novedoso de las mujeres trabajadoras, obreras y campesinas en momentos de guerra –como ocurrió en la Revolución Francesa, la Comuna de París o la Revolución Rusa–, pero no siempre lo suficientemente recordado.
En el terreno de la cultura popular, el cancionero de la Guerra Civil Española continuó teniendo vigencia tanto en España como en el resto de la comunidad habla hispana, como es el caso de las versiones hechas por el cantante y músico Rolando Alarcón. Estas versiones ganaron popularidad en Latinoamérica durante el periodo de las dictaduras militares de la segunda mitad del siglo XX; pero también a través de géneros musicales cuya estética contestataria buscaba expresarse en sus letras, como ocurre con el punk.
Y así como el lugar de las mujeres no ha sido siempre lo suficientemente reconocido en relación a la resistencia antifranquista, lo mismo pasa con un género musical que también fue repositorio de la memoria de la época: el flamenco, un género que, por su propia vehemencia, ritmo y cadencia (acaso también violencia) sintetiza forma y contenido. En ese punto de síntesis es que las artistas Érica Gigena y Soledad Bustamante crearon Aquellas mujeres de fuego, una pieza de música y danza flamencas que narran, a través de estos lenguajes, el camino de consciencia y lucha de las mujeres de la Guerra Civil Española.
La capacidad de este género para transmitir dolor, rabia y coraje lo convirtió en un vehículo poderoso de memoria popular, que en esas mujeres se expresa, por una parte, con la interpretación en vivo de músicos y cantores que versionan a José Dominguez Muñoz, conocido como “El Cabrero”, y por otra, a través del cuerpo y el ritmo de ocho intérpretes que construyen una dramaturgia desde el movimiento. Las intérpretes arman en escena el proceso que llevaron a mujeres dueñas de casa a estar en la primera línea de fuego.
El diseño escénico refuerza este relato histórico: vestuarios dispersos en el escenario evocan la ausencia de los cuerpos caídos en combate, pero también su memoria y reivindicación cuando las intérpretes los recogen y les devuelven movimiento. La progresión coreográfica es clave para narrar ese pasaje: lo que comienza como danzas individuales en soledad culmina en una gran coreografía colectiva, es decir, la fuerza organizada. La pieza ofrece además grandes momentos de tensión narrativa a través de la música y la danza cuando una caja al ritmo de marcha militar entra en conflicto con los zapateados, los braceos, los floreos, las palmas y jaleos.
Aquellas mujeres de fuego resuenan con el presente. En su reciente presentación en Hasta Trilce, una sala repleta de espectadores que no solo ovacionó la función, sino que espontáneamente entonó cánticos de las recientes movilizaciones antifascistas contra el gobierno de Milei.
La obra expresa su nudo político de manera natural, sin panfletos, y sin dejar nunca de desplegar la técnica y la poética de sus lenguajes artísticos. Una expresión, no de resistencia, sino de ofensiva antifascista desde el cuerpo en movimiento y la memoria musical.